sábado, 31 de diciembre de 2016

Feliz 2017

El mismo día, sin falta, todos los años,
Decimos al nuevo "Hola" y al viejo "vete",
A las 19:00, guapetones, un buen baño,
A las 21:30, el jamón y las servilletas de paño,
Y a las doce, horas y uvas: ¡¡Feliz 2017!!

Un saludo, Domingo.

lunes, 26 de diciembre de 2016

Hace casi un año

Hace casi un año hice una foto y la puse en mi perfil de Whatsapp. No era sino la foto de uno de los postres de la cena de fin de año. El postre, que había sido adornado con un 2016, había sido empezado y quedaba en torno a tres cuartos del mismo. El mensaje de estado era "El 2016 está ya medio comido" ... o algo así. Ciertamente un mensaje excesivo para un 1 de enero pero que al final he percibido como plenamente acertado. El 2016 no es que esté medio comido sino que, a falta de 5 días, se puede decir que ya ha acabado.

En 5 días pueden pasar muchas cosas y hasta otro mito musical podría irse. Ayer fue George Michaels a los 53 años (debo reconocer que pensaba que tendría unos 10 más). Sin embargo, lo normal será que en estos 5 días no pase mucho y que pueda abrir con cierta seguridad el blog para el año próximo.

Así pues, hagamos balance de este 2016. Al mirar las entradas, una de las cosas que he notado es que se va de forma parecido a como vino. Con multitud de ideas en mi cabecita. A diferencia del año pasado, estas están relacionadas con el trabajo y sí las he apuntado. A ver si alguna vez se materializan.

Llama también mi atención el lema elegido para el blog, "Un año en construcción". Pues sí, en construcción. La casa estuvo en construcción unos 8 meses y al final ha quedado en un estado bastante aceptable. Habría que planear la fase dos pero creo que durante unos años no habrá ni dinero ni tiempo ni ganas. Lo que sí ha estado en construcción durante los 12 meses es mi propia persona. A nivel profesional ha sido un año interesante. Con altos y bajos pero con balance bastante positivo definido fundamentalmente por la posibilidad de "volver a mis raíces".

Sin embargo, no es lo único que tengo en construcción o, mejor dicho, que voy desarrollando. La casa me ha proporcionado un trabajo que a la vez es un hobby. Un interés por esas cosas que el hombre ha disfrutado/padecido durante siglos y siglos. Podar un árbol, picar leña, tapar los agujeros que hacen los perros ...

Ese nuevo trabajo / hobby no ha reemplazado al deporte pero el deporte sí que se ha reemplazado a sí mismo. La lesión en el talón me ha hecho decantarme casi al 100% por dejar el fútbol de los jueves e intentar pasar al pádel. En cierta forma un cambio natural a ciertas edades :-). Y es que no lo pensé o si lo hice no lo recuerdo pero este año ha sido también el año en el que ya oficialmente no soy un joven sino simplemente un hombre ... camino casi a madurito porque al igual que el postre, eso llegará antes de que me dé cuenta. ¿Quién sabe si el resfriado interminable no es el primer síntoma?

Ahh, por supuesto no puede acabar el año sin hablar del reto lingüístico para la próxima década. Si los 20 fueron para el inglés y los 30 para el francés, en los 40 toca el alemán. Al menos poder leerlo. Por el momento la cosa va bien y las nuevas tecnologías la verdad es que facilitan la tarea. Este es el motivo por el cual he decidido que el nuevo lema será: 2017 Willkommen

Nos vemos en el 2017 ;-).

Un saludo, Domingo.

sábado, 10 de diciembre de 2016

Salud, Inteligencia Artificial y Deustch

Durante varios períodos en mi vida he escuchado hablar, he leído o simplemente me he informado o desinformado (imagino que dependiendo de a quien escuches) sobre la inteligencia emocional. No sé decir si ha sido una moda y si lo ha sido si ha sido una pasajera o no. El caso es que recientemente me ha pasado lo mismo pero con la inteligencia artificial. Los avances o intentos de ellos de diferentes grandes compañías, Google a la cabeza, han llegado a copar algunos titulares. Como no veo televisión no sé si han llegado también a la pequeña pantalla aunque me imagino que así habrá sido. 

Uno de las aplicaciones más citadas ha sido la siguiente:
https://quickdraw.withgoogle.com/

Es uno de los experimentos que se puede encontrar en https://aiexperiments.withgoogle.com/

El caso es que me interesó la tecnología que hay detrás y me puse a investigar. Comprobé que uno se puede adentrar en las bases de la inteligencia artificial de forma relativamente sencilla si conoce algunos lenguajes de programación que están en boga y, por supuesto, sabe inglés. Uno de los ejercicios básicos es el de discernir el número en una imagen a partir de patrones de números. Algo parecido se hace también con, por ejemplo, fotos de animales. Hay webs en las que puedes seleccionar la foto de un animal y te identifica qué tipo de animal es y además te dice la certidumbre que tiene. Incluso en Google Fotos puedes hacer una búsqueda por "labrador" y te enseñará todas las fotos que hayas sacado de tu labrador pero no las de tu pastor alemán. Bueno, más o menos, puede que algún podenquito se cuele ;-).

Así pues, en parte por interés personal, en parte por interés profesional, he estado leyendo sobre ello. Al final la inteligencia artificial es bastante rudimentaria y en muchos casos se diferencia poco de la fuerza bruta. Cuantos más fotos tenga de algo, mejor sabré y una nueva foto se parece o no mediante métodos estadísticos. Sin embargo, hay un enfoque me que me gustó particularmente porque me pareció más "humano" y es el aprendizaje basado en recompensas. No sé si se basa, más bien es al revés, hay un estudio de una famosa universidad en la que hacen un programa al que enseñan a jugar a juegos de Atari a base de recompensar acciones aleatorias que son positivas y de penalizar aquellas que no lo son. Ciertamente esto no es la panacea. No pueden saber si disparar en la pantalla 1 a algo puede tener un efecto vital en la pantalla 3 pero a corto plazo los efectos son bastante impresionantes.

Por ejemplo aquí hay una adaptación de ese estudio en un juego relativamente básico pero con cierta complejidad. Un pequeño robot puede detectar distancias a pareces, manzanas y venenos. Siempre que se estampe contra una pared o coma veneno, será penalizado. Siempre que se coma una manzana, será recompensado. 
https://cs.stanford.edu/people/karpathy/convnetjs/demo/rldemo.html

Tras 10 minutos de aprendizaje (o dándole al botón Load network from JSON ) podremos comprobar cómo el robot será muy hábil y evitará muros y venenos mientras que se comerá las manzana que pueda detectar.

Y aquí dejaremos el primero de los tópicos que quería tratar, que no es el primero que comento en el título pues ya se sabe que la salud es lo primero. Al menos en el título :-). Y mi salud se ha visto ligeramente comprometida este último mes con un catarro que no hay forma de que se vaya. Parece ser que ya lo voy consiguiendo pero ¡hay que ver qué trabajito!. Entre otras cosas es una delicia poder escuchar las cosas tras semanas de oídos taponados. A ver si el deporte ayuda a poner los mocos por ahí y a ponerme de nuevo en forma, que ya va siendo hora. Hoy al menos apenas me ha molestado el talón. Algo es algo.

Y lo último es que ... unos 10 años después de aquel Ich Lerne Deutsch que escribí en el blog, hoy puedo decirlo de nuevo. He empezado con Duolingo y la verdad es que no está mal. Es un enfoque un tanto curioso porque parece más un juego del que se espera que tú aprendas la gramática. O quizás se espera que tú lo busques por tu cuenta o hables en sus foros. Por el momento, me dice que mi nivel de alemán, tras un mes escaso de aprendizaje, es de un 25%. Algo tienen que decir, claro está :-). Me da que es algo así como que cada 10 nuevas palabras es un 1% de forma que al aprender las 1000 palabras ya llegas al 100%. Como aquel curso de inglés "Aprenda inglés con 1000 palabras". Lo digo porque tiene un índice de las palabras aprendidas y creo que eran 200 y pico. O lo mismo es solo casualidad. Ya lo iremos viendo.

Bis bald, Domingo.

sábado, 19 de noviembre de 2016

Rap .... con la O, No los controlo

Unas cuantas definiciones casi improvisadas.


  • Gozos: Tonos cortos o sordos. Morbosos coros porno sonoros con son. No los controlo. Son gozos.
  • Cojos: Godos o gordos, Los rondo, los cojo, ¿no los controlo? ... los corto, los rompo. ¡Socorro!. Los ojos rojos, rotos con dolor. Son cojos.
  • Tontos: Locos con mocos, bobos los ojos, ¿No los controlo?, ¡Cojón!. Son  tontos.
  • Sordos: Toco poco. Toco. Toco con son. Toco todos los modos. No lo logro. Vosotros como corchos. No los controlo ¡Coño!. Son sordos.
  • Gordos: Col, cocos ... ocho tochos con olor: los como. Como todos, los como. No lo controlo, No los controlo. ¿Fotos con vosotros? No, con nosotros los fofos. Somos gordos.
  • Cóndor: Pollo solo. Fondo con sol color formol. Corro, Monto foto con tonos rojos. Logro foto con tonos tontos. No los controlo. ¿Cóndor? No.
Un saludo, Domingo.

sábado, 12 de noviembre de 2016

Rap ... con la A

Esta semana escuché una entrevista al rapero Nach. El motivo no era otro que la presentación de un libro de poesía y la persona que lo presentaba era definida por el locutor de radio como "el mejor poeta vivo" de acuerdo a sus gustos. Era por tanto la presentación de un libro de poesía con profundidad, no un vanidoso intento de conseguir monetizar tu fama como cantante en un público que puede incluir, o no, al tuyo.

Durante la entrevista sonó una canción, una canción que yo ya había escuchado con anterioridad:
https://www.youtube.com/watch?v=pKiBn5PWpxw

Esta, con sus obvias características, se unía a otra más "típica" que habían puesto en otra sección del programa hacía unas semanas. No sé si el autor es el mismo pero podría serlo. No sería tanta casualidad. Como tampoco lo sería que ambas canciones hubieran sido seleccionadas por alguien  que evidentemente no puedo ser yo y que yo la haya escuchado alguna vez mientras jugaba al fútbol. Ummm, espero no meterme en un lío con la SGAE, no debiera pero con la SGAE nunca se puede estar seguro :-).

En cualquier caso, la música me sonó familiar. Además, al igual que cuando la escuché por primera vez, me llamó la atención lo mismo que a todo el mundo, los textos usando solamente una vocal. Me recordó a aquella vez que vi una historia, una sucesión de palabras, que eran completamente diferentes dependiendo de si se leían al derecho o al revés. Muy parecida a aquella otra historieta cuyos renglones, leídos al derecho o al revés, también daba lugar a dos resultados completamente distintos. No dejan de ser juegos ... y a mí me gusta jugar.

Hoy empezaremos con la A.

Tra, tralará, tralará
Canta la rana cada mañana,
Mañana cantará la rana, saltará la alarma.
"Matar, matar, matar ..."
Alarga la palma la alarga, la alarga, la para.
"Calma, calma, calma"
Anda hasta la taza, caga, la plasta mancha ... argggg
Nada a la panza ... a la caza va la falsa rata.

Amanda va a la casa; la cara lavada
Danzará, danzará hasta las tantas,
Las almas vanas, Las malas ratas vagan, las ratas pagan, Amanda nada gana.
La mala rata paga la pasta para amarla.
Amanda traga sal amarga, la cara plana
¿La asaltarán, la raptarán, la arrastrarán hasta la cama?
¿Atarla, catarla, matarla?  ...

Amarla, amarla, amarla ... La rata ama a Amanda
La calma, llama a la pasma, la saca
¿Malvada rata canalla? santa, casta.
Amanda ama a la rata .., a la rana, a la alarma ... al altar
La amará cada mañana, nada basta.
Mañana cantará la rana, saltará la  alarma.
Amanda charlará, cantará, amasará la tarta ... amará ...
"Calma, calma, calma"


Un saludo, Domingo.

sábado, 5 de noviembre de 2016

Un grano no hace granero

Pero ayuda a su compañero. Eso es lo que decía el refrán que aprendí de pequeño. No recuerdo muy bien cómo pero creo que, de alguna forma, llegó a mi poder un libro de refranes con dichos que no todo el mundo conoce. Amigo que no presta, cuchillo que no corta, que se pierdan, poco importa. Ese seguro que es del libro. El del título, no estoy seguro. Más bien creo que se lo escuché a mi abuela alguna que otra vez.

La sabiduría popular es doblemente sabia, La gente y el tiempo han ido realizando esa labor que la RAE se reserva para el idioma, ha limpiado, ha fijado y ha dado esplendor. No siempre en forma de refranes, a veces, simplemente, en forma de libros. O en forma de párrafos geniales. Dicen que la rosa del Principito era especial porque era suya o por el tiempo que le había dedicado que viene a ser lo mismo. Dicen que al protagonista de Moby Dick pueden llamarle Ismael. Dicen muchas cosas de las cuales no me acuerdo.

Mi memoria nunca ha sido mala, más bien al contrario. Y al igual que todo el mundo (creo) siento que lo es. De no ser así, no entiendo los anuncios en la radio de productos que mejoran la memoria. A mí, me ha pasado desde pequeño con, por ejemplo, los nombres de las personas. Pasados unos años, pocos, hasta olvidaba el de mis profesores. Los envidiaba pues años y años después ellos eran capaz de seguir recordando los de sus alumnos. Quizás es un tipo de memoria como la de los camareros, especialmente entrenada, hipertrofiada, casi.

En cambio, hablo con personas sobre cosas que sucedieron no hace mucho y veo que sí las recuerdo y ellos no. Y hablo de personas que se presuponen que son muy inteligentes y deben tener también una buena memoria. Eso, la verdad, me tranquiliza. Al menos un poco. Todavía me inquieta el no recordar exactamente todos los nombres pero quizás es solo porque quiero recordarlo todo y, tal como decía Sherlock Holmes, la memoria es finita y el espacio que tenemos limitado. Si hay algo que entra, otra cosa debe salir. Y a lo mejor esa cosa que debería salir es más importante que la que te gustaría que entrara. De ser así, bien está el no recordar.

Un grano no hace granero, pero ayuda a su compañero. Todo recuerdo, toda memoria que guardemos, que sea significativo. Tengo la sensación de que eso me hace más feliz. Y tengo la sensación también de que ya tendremos tiempo de olvidar. ¡Será por tiempo!

Un saludo, Domingo.


sábado, 29 de octubre de 2016

Decrepitud

Decrepitud me suena a chicos exploradores, a furgonetas "camperizadas", a barbacoa y a castañas asadas. Decrepitud me suena a algo que crepita y quizás la raíz latina es la misma. Sin embargo, la decrepitud tiene peor prensa, indudablemente. Y no es de extrañar pues es nuestro talón de aquiles y más concretamente el talón de aquiles de mi talón de aquiles.

Aunque, a fuer de ser honesto, no es solo mi tendón sino cualquiera de ellos cuando se ve sometido a un sobrepeso de incluso solo 3 ó 4 kilos más de lo usual. Así que, bien sea por casualidad, bien por edad o bien por esos helados del verano, ando arrastrando problemas en el talón y hasta los pies.

He dejado el fútbol de los jueves temporalmente y estoy meditando que sea definitivo y sustituirlo por un deporte que castigue menos las articulaciones. El pádel podría ser el nuevo fútbol siete. Ya veremos.

Por lo demás, sigue el goteo de actuaciones que, poco a poco, van dejando una casa más conforme al ideal que uno tiene y menos a la realidad común que es que toda casa que se precie tiene que tener cosas inacabadas, cosas inútiles y ... aquello en lo que normalmente no reparamos porque nos gusta como está. Todo llegará.

Un saludo, Domingo.

sábado, 15 de octubre de 2016

Y otra media

Par de semanas productivo el que hemos pasado. No solo el otro par de eventos sociales pasaron sino que he podido terminar de pintar la habitación. Para el segundo par de semanas, tercero de la entrada, del mes de octubre hay previstos un nuevo evento social (boda) y lo que sea que pueda seguir en las pocas horas de luz que quedan antes del cambio de hora.

Quizás debería ir haciendo una lista de cosas que tengo que hacer, cosas que puedo hacer sin luz natural y cosas que voy a tener indefectiblemente que dejar para los domingos. O eso o levantarme temprano, que es lo que realmente debería hacer. Aunque también es cierto que para hacer eso, además de ganas, el físico debería acompañarme. No menos de dos semanas más es lo que calculo para poder tener el talón a punto. Y eso si es que consigo deshacerme del resfriado pues no será la primera ni la última vez que un resfriado me dura un mes.

En cualquier caso, la cosa marcha y lo hace en varios frentes. A punto estoy también de acabar otro de mis retos literarios, leer el Conde de Montecristo en versión original. Tras él, la idea sería continuar con ese propósito malogrado hará 10 años. Aprender alemán. Ich lerne Deutsch, se titulaba aquella entrada en el blog.

Seguiremos informando.

Un saludo, Domingo.

sábado, 1 de octubre de 2016

Media habitación

Un par de semanas para pintar media habitación. No está mal. En horas quizás no han sido tanto pero en tiempo efectivo que he podido dedicar parece que sí. Parece que el tiempo en la nueva casa ha cambiado de dimensión, hay más cosas que hacer y todas necesitan más tiempo. Acaba de empezar un mes y, cuando acabe, pronostico que habré acabado la otra media habitación, podado algún ¿medio? árbol y alguna que otra cosa suelta por aquí y por allá.

¿Cómo estará todo dentro de un año?. Interesante pregunta.

Un saludo, Domingo.

sábado, 24 de septiembre de 2016

Jack the Ripper (Relato)

La víctima:

Siente la espada invisible, una corriente de aire te toca,
Su filo mellado te araña, el vaho se hiela al salir de tu boca,
Su filo se clava, tu carne se entrega, no se funden, eres funda,
La hiel de gallina en su luna de piel, otra gota, otra, rezuma la miel,
Sin fuerza y con maña, la noche silenciosa y rotunda,
La vida que no elegiste se va y con ella la alegría que es poca,
Sin apegos se apaga, pagas tú la cuenta y el asesino se aleja.
Scotland Yard dirá que es un espíritu y no lo encuentran.
Buscaron en todos lados, encima y debajo de la última roca,
Pero no en tu pupila, pupila de niña, lo único que de niña te queda.


El verdugo:

Empuñas el escalpelo con destreza facultativa,
Una llave buscando su cerradura en femenina espalda,
La llave maestra del maestro de llaves, terror de las esquinas,
Terror de la noche, la penumbra y las tinieblas; terrorífica es tu misiva,
Cartero del miedo presentas tus conquistas a tu amiga la parca,
¿Enferma, psicópata, caradura? Cuando la carne se abre, ella se activa.
Reúne antiguas bellezas, las lleva a la morgue, ninguna la esquiva,
Y mientras la policía busca una pista, desde el pelo hasta la falda,
Tú obra te encumbra, la ciudad te tiembla y tú ya vigilas,
Una nueva pupila que lleve impresa tu cara en su última luz.

sábado, 17 de septiembre de 2016

Juez de menores (Relato)

Hoy no tengo muchas novedades que comentar o, de tenerlas, no debo estar en ánimo de hacerlo. Así pues, cuando me he planteado sobre qué escribir, se me ha venido a la cabeza escribir un microrrelato. Y al preguntarme sobre qué versaría dicho microrrelato me he dicho que estaría bien que fuera una condena ejemplar de esas que imparte el Juez de Menores más famoso de Granada, cuyo blog sigo. Solo que esta vez no sé cómo será la condena porque el señor juez no será él sino que seré yo y el delito está todavía por ser inventado. A ver qué se me ocurre.



Daniel suspiró aliviado, la condena no era severa. Diez horas de servicio a la comunidad cada uno. Un par de días haciendo el chorra el algún sitio y fuera. Para haber tenido una pelea con cuchillos con Curro que afortunadamente solo se había saldado con cortes en los antebrazos de ambos y que paró tan abruptamente como había empezado justo cuando la patrulla de policía paró su coche junto a la parada de autobús donde todo iba corriendo. Solo le quedaba saber exactamente qué harían.

El juez prosiguió, sería en la Cruz Roja de Graná, el sitio que había suplido los objetores del servicio militar con condenados por el Juez hacía ya más de veinte años. Tenían que ir cuatro veces al año y pasar media hora donando sangre. Para ello, debían mantenerse sanos, cumplir los requisitos de idoneidad para donar, no haberse tatuado en los últimos seis meses, no haber tomado aspirina ni ningún otro medicamento en la última semana, no haber mantenido relaciones de riesgo ...

Cuatro veces al año, media hora por vez ... necesitarían cinco años para cumplir las diez horas de condena. Cinco años siguiendo una vida sana, alejado de problemas para chicos de dieciocho años era más de la cuarta parte de su vida. No era una condena a cadena perpetua pero casi. Ya no sonaba tan bien.

Cinco años después, Curro estaba en prisión y Daniel se alegraba. Inicialmente, la condena había sido mucho más severa de lo que había previsto pero cinco eternos años después estaba a punto de acabar tercero de derecho y estaba mucho más cerca de ser Juez de Menores ... y donante asiduo de sangre.

Un saludo, Domingo.

sábado, 10 de septiembre de 2016

Goteras

Esta semana un compañero nos comentaba que, en el garaje del edificio, su coche era el segundo más viejo. Tiene un BMW que compró hace 15 ó 16 años cuando coincidí con él por primera vez. Sin duda en su casa cuidan los coches porque el de su mujer tiene uno o dos años más. Precisamente bromeé diciendo que en su casa le pasaba lo mismo, también tenía el segundo coche más viejo.

Comentó entonces que el coche de su mujer tiene un gasto anual de reparaciones de entre 100 y 200 euros, dependiendo del tipo de "gotera". Por ahora, les sigue compensando. En el momento en el que llegue una gorda, posiblemente le den pasaporte y compren uno nuevo con la intención de que vuelva a durarles, esperemos, otros 20 años o casi.

El paso del tiempo produce la misma evolución en sistemas animados e inanimados. En personas, animales, coches o casas. Al principio, las goteras son mínimas. Al menos las naturales, que siempre hay algún perro que muerde a otro :-). Después, conforme se van desgastando, surgen lo que realmente solemos llamar goteras. O lo que un conocido solía definir como "los problemas del DNI". Cuanta más edad indica el DNI, más problemas.

En mi caso, independientemente de lo redondo de la edad, mis goteras (las físicas al menos) suelen centrarse en las articulaciones. Y suelen acentuarse cuando cojo dos o tres kilos de más. Si, como es el caso, cojo 5, más se acentúan. La novedad esta vez es que no me han salido en las rodillas sino en el talón de Aquiles. Precisamente yo pensaba que mi talón de Aquiles eran las rodillas pero no, al menos no únicamente ellas.

Visto lo visto, he decidido usar la casa, ahora mismo que no tiene muchas goteras, para intentar arreglar las mías. A ver cómo lo hago pero debería intentar intercalar más actividad física y dieta, por supuesto dieta, entre las actividades de mantenimiento de la casa y sus habitantes. Es mucho suponer pero esperemos que así, cuando la casa tenga goteras, sea yo el que no las tenga. Ya veremos.

Un saludo, Domingo.

sábado, 3 de septiembre de 2016

Vacaciones y trabajo

Normalmente uno coge semanas "enteras" de vacaciones. De lunes a viernes. Eso hace que, junto al fin de semana anterior y al siguiente, no vaya a trabajar en nueve días. Este año, sin embargo, me he cogido las vacaciones de miércoles a martes. La primera semana trabajé lunes y martes, descansé una semana completa de siete días y volví al trabajo el miércoles de la semana siguiente. Como digo, son siete días de descanso en vez de nueve pero el efecto en las semanas que trabajas es cuando menos curioso. Es como si tuvieras a la vez una semana de vacaciones y dos semanas de trabajo reducido. 

De todas formas, tal como hablaba con Giovanni esta semana, el nivel que a cualquiera nos gustaría alcanzar es el de tener que trabajar por huir del aburrimiento. Si tuvieras la vida resuelta y unas rentas de las que vivir holgadamente, todavía sería interesante tener una rutina, una labor que hacer a la que llamar trabajo hasta que te apeteciera más aburrirte que lo contrario.

A ese nivel no es probable que llegue; desde luego no en los próximos años así que no voy a darle muchas vueltas. Ahora mismo mejor me centro en las cosas que se pueden llamar "trabajo fuera del trabajo". Ese trabajo fuera del trabajo se ha visto incrementado recientemente y, aunque ahora es hasta agradable, llegado un momento no sabemos si se presentará simplemente como trabajo y por tanto desearé no tener que realizarlo. Excepto para huir del aburrimiento. 

Un saludo, Domingo.

sábado, 27 de agosto de 2016

It's been a while

Ha pasado bastante tiempo desde la última entrada. Creo que con bastante diferencia la vez que más tiempo ha pasado entre una entrada del blog y la siguiente. Al menos el motivo principal ha sido bueno, la mudanza que mencionaba en la última entrada acabó y lo que continúa es el "asentamiento" en la nueva casa y las mil cosas nuevas que hacer allí.

El motivo secundario es puramente logístico, no le llega internet al ordenador que normalmente uso para escribir y está costando trabajo que lo haga. Una señal muy baja que rara vez conecta y que, cuando lo hace, no dura mucho. Work in progress, a ver si poco a poco consigo ir limando esas pequeñas asperezas cibernéticas en casa de mis progenitores mientras limpio, fijo y doy esplendor en otras estancias de mi propia casa.

Por otro lado, algo que también ha pasado desde la última entrada es ... un año entero. Al menos eso marca el carnet de identidad. Además, que ya he tenido oportunidad de verlo en algún documento oficial. El mismo día de mi cumpleaños fui a donar plasma así como a incorporarme a la base de datos de donantes de médula. Ese mismo día, en el impreso, aparecía un número divisible entre varias de las potencias de dos. Debo reconocer que fue un tanto chocante pero da la sensación de que ya me he acostumbrado. Y si no me he acostumbrado, tengo 10 años completos para hacerlo :-).

Ya por último, la llegada de septiembre marcará, espero, el comienzo de la operación bikini porque ese par de kilos que he ganado durante el verano me está martilleando los talones y amenaza con darme de baja deportiva durante las primeras jornadas de liga.

Esto es todo por el momento, ahora me voy a ver si celebramos el cumpleaños con la familia como se merece.

Un saludo, Domingo.

sábado, 16 de julio de 2016

De mudanza

No tengo posibilidad de escuchar el sonido en este ordenador pero imagino que sonarán bien Tontxu y EBS cantando el famoso "Corazón de mudanza":
https://www.youtube.com/watch?v=zgEzW03-QhA

Y es que, si se cumplen los pronósticos, esta semana próxima tendré de mudanza todo menos el corazón.

Dicen que la vida son una sucesión de ciclos de siete años. Creo que alguna vez he comentado sobre tal cifra. A riesgo de contradecirme con la vez anterior aunque más bien a riesgo de decir algo muy parecido pero no exactamente igual a lo que dije la última vez, esos siete años pueden tener sentido porque no es ni mucho ni poco pero también puede tener sentido porque si son siete la has clavado y si son ocho no te has equivocado mucho.Algo así me ocurriría a mí pues la mudanza se produciría siete año después de la compra aunque seis después de la boda.

¿Cosas que cambiarán tras la mudanza?. Mucho más trabajo en la casa (o fuera de ella), muchas menos idas y venidas para dar de comer a los perros, menos escaleras, menos vecinos, unos tres minutos más de camino al trabajo ... por nombrar solo unas pocas.

¿Cosas que no cambiarán?. Las obras; la casa seguirá en obras durante un tiempo. De hecho, las obras son ese elemento de incertidumbre que se despejará durante la semana. He consultado a los hados y me han dicho que sí. Mi problema es que los hados no son del todo fiables. A veces es mejor consultar los dados.

Un saludo, Domingo.

sábado, 9 de julio de 2016

Consumismo

Si viviera en Cuba la pregunta que me hicieron ayer hubiera tenido una respuesta muy diferente. Pongámonos en perspectiva. Una lavadora que tiene 6 años se estropea. Llamas al técnico y tras hacer varias pruebas concluye que son "los cojinetes". A continuación llama para pedir un presupuesto. Al acabar la llamada, hay una cifra: 280 euros.

Contesto: "Lo hablaré con mi mujer pero creo que compraremos una nueva". Me mira con una expresión que osaría a definir como perplejidad y entonces el perplejo soy yo. ¿Cómo puede extrañarle que decida no reparar una lavadora de 6 años por 280 euros cuando por poco más tienes una nueva?.

Me dice, es que hay que desmontarla completamente, quitar hasta el tambor para poder cambiar los cojinetes, por eso es la cantidad. No, si yo eso no lo dudo. De hecho, lo entiendo perfectamente. Reparar esa lavadora requiere una serie de horas, ellos tienen un precio por hora ... total tantos euros. De hecho, pregunté luego a mi cuñado y me confirmó que el precio de los famosos cojinetes eran unos 30 euros. Pongamos 60. El problema es que él confirmaba que repararlo tú mismo requiere horas y horas y el riesgo de que no quede bien.

Eso en Cuba no pasaría. Imagino. Y en una sociedad más racional entiendo que tampoco. Y si yo fuera un manitas menos. Pero a pesar de que podría adquirir el conocimiento necesario, no tengo el tiempo para hacerlo y sí el dinero para comprar una nueva por "algo más" de lo que me cuesta que otro la repare. De hecho, ahora que lo pienso, lo mismo aquí también se repara la lavadora. Lo mismo si la dejo en cualquier sitio la verá algún chatarrero que tenga el tiempo y conocimientos, cogerá cuatro piezas de otra lavadora que sí sea un despojo y venderá esta que está prácticamente nueva por 150 euros.

Tiramos una gran cantidad de cosas y con ellas tiramos dinero, cantidades increíbles de dinero. La lavadora es un ejemplo pero hay más: mis libros. Al seleccionar los libros para la mudanza, hubo una gran cantidad de ellos que sabía que no volvería a leer de nuevo. Un libro en cierta forma es como un animal de compañía, merece un dueño que lo quiera y lo lea. Así que decidí darlo a alguien que quisiera leerlos.

No sé cuántos libros son pero pongamos que entre 60 y 100. Digamos que 100 porque es un número más redondo. Diferentes temáticas, diferentes idiomas ... alguien debería estar interesados en ellos. Mi primera idea fue darlos a alguna biblioteca aunque no sé si la gente sigue yendo a las bibliotecas a leer. La segunda fue cobrar un euro por libro. Si dono 100 libros, por poco que me costaran en su momento, estoy donando digamos que 500 euros. Vale que es como cuando vas al cine, no pagas por la copia de la película, pagas por el rato que pasas. Mi forma de ver los libros es similar, no pagué por el objeto físico sino por la lectura. Una vez leídos, si además puedo recuperar algo de la inversión inicial, pues mira.

Y ese recuperar no tiene por qué ser en dinero y no tiene por qué ser para mí. Puede ser para una ONG. Así pues, pensé que lo mismo se podría hacer algo para alguna de las ONGs con las que colabora mi empresa. Al final en la empresas decidieron que no, que era demasiado jaleo. Bueno, pues ya está. Otra opción es donarlos a una obra social. Hablo con un amigo mío que trabaja en Unicaja y me dice que se pone en contacto con la persona que se dedica a la obra social. Al día siguiente me mostraba, digamos que su desilusión, porque la acogida no hubiera sido más efusiva. No valoraré al responsable, sus motivos tendrá, ni a Unicaja. La prueba está en que mi amigo trabaja para ella y se ofreció a moverlo todo, lo intentó y al final simplemente no pudo ser.

La última opción barajada es una ONG que se dedica a ayudar a animales. Veremos si se puede hacer algo. Otra opción sería acercarse a algún mercadillos de estos que tanto gusta a los guiris. La última, posiblemente la ideal, sería la de ponerlos en circulación en alguna de estas aplicaciones que hay para compartir libros pero requiere estar yendo cada dos por tres a Correos y posiblemente que el comprador se gaste en gastos de envío casi el mismo dinero que en comprarlo nuevo (o usado desde otro país). De nuevo, en otra sociedad, en otras sociedades, no pasaría. Y la culpa en parte es mía por formar parte de esta sociedad y por no querer pasarme 100 veces por Correos para darle 100 nuevas vidas a 100 viejos libros.

Un saludo, Domingo.

sábado, 2 de julio de 2016

Cosas que hacer antes de los 40

El jueves pasado firmé la venta de la que ha sido mi casa durante los últimos años. Es la primera vez que asisto a la venta de una casa en la que yo he vivido. Tras correr y correr e ir aquí y allá, acabamos en el Leroy Merlín. Debían ser las 9 y media de la noche, no habíamos cenado y todavía había que ir a echarle de comer a los perros así que decidimos entrar en la cafetería y pedirnos esos bocadillos de carne que tanto había recomendado uno de los amigos del trabajo.

Los trajeron y tal como ya me habían anunciado, el tamaño era considerable y el sabor exquisito. Le di un par de mordiscos a una de las dos mitades en que los habían dividido y entonces caí en que podía dejarme llevar por esa corriente que tiende a publicar fotos de lo que come en su Facebook, Instagram o lo que sea y compartirlo con los amigos. Sin embargo, yo solo lo compartí con el grupo de Whatsapp que tenemos para la hora de la comida en el trabajo. Un número muy reducido de personas, cuatro, del cual el consiglieri era uno de ellos.

Envié la foto sin mencionar nada más y al par de minutos ya tenía respuesta:
- Leroy Merlín, ¿verdad?, ¿Qué tal están?

Respondí que sí en alemán, con la duda de si se entendería bien o no. Luego me preguntaron por cómo había ido todo con la compraventa y entonces fue cuando escribí lo que da título a esta entrada. Vender una casa y probar los bocadillos de carne de la cafetería del Leroy Merlín: dos cosas tachadas de la lista de cosas que hacer antes de cumplir los 40.

Se lo radié a mi mujer mientras lo escribía y entonces me preguntó ...
 - ¿Ahh, pero tienes una lista?
- No, no la tengo pero es lo que he escrito.

Y luego, en los días posteriores, he estado pensando que quizás no hubiera estado mal tenerla. O quizás hubiera sido muy depresivo. Al fin y al cabo, como dice esa cita que he escuchado varias veces, la vida es lo que te ocurre mientras persigues tus sueños. O como aquel periodista francés en Japón que fue invitado a una casa local para descubrir que todos los muebles eran coloniales y al preguntar si no había allí nada típico japonés recibió como respuestas que allí, todo lo que NO se veía, era japonés.

Así pues, todo lo que probablemente no estaría en esa lista, sería lo conseguido antes de los 40. Visto así, no sabemos si al final esos dos puntos, la venta y los bocadillos, deberían contar a favor o en contra. Lo seguiré pensando y lo mismo para cuando cumpla los 40 ya me he decidido.

Un saludo, Domingo.

sábado, 18 de junio de 2016

El más grande

Con sus poco más de 3 kilos era el más pequeño. Sin embargo, se ve que el peso o el volumen son malas medidas para el vacío que no es sino la ausencia de todo, peso o volumen. Desde que se fue, especialmente esta semana, he tenido la sensación de que los 7 perros que me recibían eran solo una fracción de aquellos que solían hacerlo no hace tanto. Es una sensación muy extraña porque cuentas: uno, dos ... y así hasta siete. Y te das cuenta de que, efectivamente, solo falta uno y era además el más pequeño. Sin embargo, ese 3% de peso que falta, ese 12,5% de animales que no están, se antojan algo así como un 30%. Curiosidades de nuestra mente. Incluso cuando les doy de comer. El que come solo sigue comiendo solo y no noto diferencia. Los dos que comen aparte, siguen comiendo aparte y no noto diferencia. Y los cuatro que comían a continuación, con uno de ellos sobre la mesa para que pudiera comer en paz siguen siendo cuatro pero contando casi como tres y pico porque sigue faltando algo.

En cualquier caso, se avecinan tiempos de cambio. En el trabajo, la mudanza a la nueva casa ... en cierta forma una nueva vida empezará a mitad de año. Mi foto en el Whatsapp es una tarta de Navidad, con un 2016 pintado y a medio comer. El comentario: "el 2016 está medio comido ya". Y no es que lo esté ahora, es que ya lo estaba cuando tomé la foto el 1 de enero. Así pasa el tiempo.

Un saludo, Domingo.




sábado, 11 de junio de 2016

Cara de fumaíllo

Esta es una historia de amor con final triste que empieza con un intrascendente dato técnico posiblemente desconocido para los lectores del blog: Mi móvil es un móvil chino. Este incontrovertible dato, además, debe leerse como que el fabricante tanto del móvil como de los componentes es chino. Quedaría por saber si es un original chino o una copia china del original chino. Creo que el caso es el primero. Lo compré hace dos años porque quería un móvil de 2Gb de RAM y cierta potencia por la mitad de lo que solían costar móviles similares de marcas conocidas en Occidente.

Continúa con otro dato que sí debe ser más conocido para los lectores del blog. Soy donante de sangre. Esta semana, si no me he equivocado en las cuentas, llegué a las 130 donaciones. Al llegar al Centro Regional de Transfusión Sanguínea de Málaga me encontré con que había una cierta cola, inusual salvo que regalen algo o hayan hecho algún tipo de llamamiento y que incluso había una unidad móvil de Telecinco grabando lo que llamaban "un falso directo" que debían emitir esa misma noche en el telediario y al día siguiente en el matinal.

Y acaba, como decía, con un final triste. Al llegar a la casa, nunca nos recibirá Pachitto con su "Panchi-rally" ni tendré que subirlo a la mesa para que pueda comer tranquilo sin la preocupación de que cualquiera de los otros le quite la comida.

Casualidades e ironías de la vida, el lunes, tras ir a donar sangre, les daba de comer a los perros. Pancho, subido a su mesa, se negaba a comer. No era inusual, pasaba con cierta frecuencia, sobre todo si el día anterior había comido bastante. Yo lo subía y lo bajaba con una mano, sin esfuerzo alguno. Su peso: 3,5 kilos. Su raza: cruce de Chihuahua con, quizás, Caniche. Los ojos saltones, hocicorto ultrafino y carilla de fumaíllo.

Pensé que dentro de unos años estaría tan mayor que quizás no sería conveniente cogerlo de esa forma. Por otro lado, la diferencia de tamaño con los otros y su miedo a ser arrollado por ellos en cualquier carrera inconsciente seguiría haciendo necesario darle de comer aparte. Me equivocaba.

Aparentemente tenía alguna enfermedad latente que se manifestó tras un mordisco de la que es a la vez la más pequeña e infantil y la segunda más grande en volumen. Un juego/combate desigual. Lo llevé al veterinario y suturaron las lesiones cutáneas, de poca preocupación, sin anestesia porque era tarde y no era conveniente que un perro despertara de la anestesia en la casa donde los profesionales capaces de identificar los problemas secundarios de la misma brillan por su ausencia. Ni se movió cuando le echaban los tres puntos: era tan duro como pequeño.

De madrugada me despertaron los ladridos lastimeros y, como no se le pasaban, lo llevé a urgencias. Solo pudieron comprobar que estaba muy dolorido pero no apreciaron nada que pudiera ser el origen de las molestias. Le inyectaron un calmante y el perro, mucho más tranquilo, volvió a casa. Descansando lo dejé y me fui a trabajar temprano con la intención de así volver antes y poderlo llevar al veterinario en caso de ser necesario.

Al volver por la tarde, no había probado bocado, se había bebido toda el agua y estaba tirado en el suelo echo un trapo. Alarmado lo llevé al veterinario y al llegar vi que la orina tenía un color rojizo. Del veterinario de nuevo al hospital. Se quedó hospitalizado con gran alivio por mi parte porque pensé que el perro no iba ni a durar unas horas. A ello habían contribuido unas miradas entre los veterinarios cuando descubrieron que lo que había en la orina era bilirrubina, indicativa de fallo hepático.

Al día siguiente, el perro no se encontraba mucho más animado pero al menos los análisis mostraban señales de progreso. Yo seguía confiado. Y más al tercer día cuando, tras jugar al fútbol, fui a visitarlo y lo encontré de pie. Estuvo de pie, en su jaula, durante todo el tiempo que yo estuve allí. Su estabilidad no era la mejor pero poco más se podía pedir a un perro que había esquivado la muerte varias veces y estaba ahora centrado en conseguirlo otra más. No lo pedí pero me lo dio, un par de veces acercó su minihocico ultrafino a mi mano como si me acariciara él a mí en vez de yo a él. Y carilla de fumaíllo, Esta vez con razón pues a su estado de gravedad se le debía unir el efecto de la medicación. Quise sacar el móvil para hacerle una foto. Pero era inútil porque la actualización de software que el fabricante chino había sacado para ese modelo la semana anterior solamente tenía un fallo: abrías la cámara y nada se veía, todo estaba negro. Tan negro como el negro de la foto cuando apretabas el interruptor virtual.

Ayer, en cambio, me llamó el veterinario. Algo parecido, salvando las distancias, a cuando falleció mi abuelo. Con el fallo hepático en remisión ahora había señales, muy intranquilizadoras de fallo renal y también de posibles problemas de coagulación. Un par de horas después vendría la confirmación. La confirmación de esa tristeza que te recuerda cualquier cosa que ves, cualquier cosa que escuchas y que no puedes sino relacionar con tal o cual cosa, relacionada con tal o cual otra y que invariablemente acaba en el ser perdido. Independientemente del número de patas. La confirmación de que , la historia de amor, pues dije que era una historia de amor, efectivamente tendría final triste.

Así pues, el lector avezado habrá notado ya que han quedado justificadas las menciones la móvil chino, a la donación de sangre y a la tristeza del final Sin embargo, la historia de amor no lo ha hecho todavía y es simplemente porque así es como quisiera acabar la entrada y como quisiera recordar a Pancho, sus "Panchi-Rallies" y su carilla de Chihuahua, esa que auxiliares de veterinaria o veterinarios coincidían en calificar de "muy simpática", calificativo que, ciertamente, hace más justicia que el titular de la entrada.

Pancho o Panchitto, apareció hace unos años por el campo. Acompañaba a otro perro que, por algún motivo, visitaban a los nuestros. El otro parecía vagabundo. Él no lo era. No tenía chip pero tenía collar y una vez vino con una cuerdecita cuidadosamente atada al collar, señal de que se había escapado. No era un perro maltratado pero por alguna razón la búsqueda del amor le invitaba a abandonar su hogar. Al principio pensamos que era simplemente algo físico, hormonal, por no estar castrado. Pero era algo más que eso.

De natural miedoso, tardó cerca de un mes en dejarse acariciar y cuando ya parecía que era uno más del grupo, desapareció para volver a las varias semanas con la anteriormente mencionada cuerda atada al collar. Volvió para no irse más, para pasar todo el tiempo que pudo al lado de su amado. Esa conexión que desafía la mera explicación de que Scotty era un animal castrado y la ausencia de olor que ello provoca puede ser interpretado por los machos no castrado como olor a hembra.

Panchitto recibió su chip, fue chipado como diría un veterinario, fue castrado con la esperanza de que la compulsión que tenía por montar al que ya considerábamos "su novio" fuera desapareciendo a la misma vez que la cantidad de testosterona que todavía circulaba por su sangre. No lo hizo. Ni lo hizo años después de castrado. Y lo que es todavía más sorprendente, Scotty en vez de reñirle como hace con cualquier otro perro, ya le triplique en altura y peso, se dejaba masajear los cuartos traseros pues, debido a la diferencia de tamaño, era lo único que conseguía.

El martes hasta me dio la sensación de que me preguntaba por él. Es de esos perros que parecen personas y a los que solo les falta hablar. Pero clara y lamentablemente no lo son ni pueden hablar. Posiblemente en unos días ya se habrá olvidado de su novio. No es posible sino seguro que yo ya he derramado más lágrimas recordando esa cara de fumaíllo de las que él jamás podrá verter. Pero así son las historias de amor, sobre todo las tristes que no por tristes dejan de ser de amor.

Un saludo, Domingo.

sábado, 4 de junio de 2016

Un sueño reparador (Mini relato)

Se levantó tranquilo, con la tranquilidad del que no recuerda nada de lo acontecido en las últimas horas y la despreocupación por no hacerlo. Se dirigió al baño con una velocidad y decisión que podía parecer la de otros tiempos pero cuya única razón era el frío de la noche. Delante del espejo, introduciendo la mano entre el cuerpo y la ropa se rascó la nalga derecha tal como solía hacer hace años tras sus siestas de pijama y orinal. Abrió el grifo del agua caliente; también el del agua fría, mínimamente, y con las manos llenas de gel se lavó primero las manos y luego la cara.

Con los ojos cerrados, palpó en búsqueda de la toalla. La toalla hacía años que había perdido la suavidad, pero al menos conservaba su poder de absorción. En otra ocasión habría tenido el pensamiento recurrente, la intención de tirarla y el remordimiento por haberlo pensado. No en esta ocasión. Ahora solo le preocupaba una cosa: volver a la cama.

Un saludo, Domingo.

sábado, 21 de mayo de 2016

Jugando al billar

Hace unas semanas trajeron un billar a la zona de recreo de la empresa y de vez en cuando me pasaba por allí a ver si había alguien jugando. Una de las veces me encontré con tres compañeros, con la misma categoría que yo aunque en un equipo diferente. Los cuatro estamos (o estábamos) preparándonos además la misma certificación.

Luego, hemos coincidido varias veces allí y hemos jugado tres o cuatro partidas. Normalmente formamos dos equipos mixtos pues de los cuatro, dos somos españoles y los otros dos, inglés e irlándés si no recuerdo mal.

El irlandés es, precisamente, el que juega mejor con muchísima diferencia. Fue algo que sospeché la primera vez que lo vi entrar. No sé todavía muy bien por qué porque nunca habíamos hablado de ello ni demostró ninguna actitud que lo delatara. Simplemente entró de forma casual y quizás fue eso lo que despertara mi sentido arácnido. ¿Quién sabe?

El caso es que cuando golpeó el primer par de bolas ya quedó bastante claro que los demás podríamos jugar mejor o peor pero él simplemente sabía jugar. Está o estaba apuntado a algún tipo de club y nos cuenta cosas acerca de cómo juegan, qué normas usan, etc.

No necesariamente relacionado con lo que nos cuenta, ya sabía que hay infinidad de normas, quizás tantas como jugadores (todos los que hemos jugado, lo hemos hecho alguna vez con alguien que seguía unas normas ligeramente diferentes. O incluso nos las hemos inventado, tal como hacíamos Jesús y yo hace unos años para alargar las partidas, maximizando el dinero y la diversión al forzarnos a embocar las bolas en orden numérico.

Lo que no sabía, aunque debía habérmelo imaginado por razones como la anteriormente mencionada así como la afición angloparlante por las apuestas es que se pueden llevar las cosas mucho más lejos. Tanto más lejos cuanta mayor sea la habilidad de los participantes con el taco y las bolas de billar.

Por ejemplo, Cada mes ponen un bote dedicado a un juego en concreto. Quien desea jugar, echa un euro al bote. A continuación, coloca las bolas, abre y debe intentar embocar tantas bolas como pueda sin fallo. Si sucediera que emboca las 15 bolas, volvería a poner todas las bolas, volvería a abrir y continuaría. Cuando el inevitable fallo se produjera, se contaría el número de bolas embocadas de forma consecutiva, pongamos que 20, y esa sería la marca a batir Si nadie en el mes bate la marca, la persona se lleva el bote. Por otro lado, si el bote es goloso y uno es habilidoso, solo tendría que echar un nuevo euro y probar suerte.

Independientemente del bote, tiene pinta de ser un juego divertido para los principiantes. Es algo que habrá que probar. Lo que veo más complicado es alcanzar el récord que nos contaba este compañero de alguien que embocó 77 bolas sin fallo. Dicho de otra forma, abrió cinco veces, metió las 15 bolas cada vez que abrió, abrió una sexta vez, embocó la primera, la segunda ... y falló.

Eso me hizo pensar en otras situaciones, lo que normalmente llamamos "la élite" de personas que hacen cosas muy difíciles y lo hacen muy bien y durante mucho tiempo. En muchos casos además la precisión que alcanzan es más de máquina que de persona. Hablo de algo tan positivo como un jugador de billar, un futbolista, un tenista, cualquier otro deportista, el creador de un sistema operativo,  o algo tan negativo como un francotirador, un asesino en serie, un ladrón de bancos, un creador de virus informáticos ...

Al final la habilidad es la misma. Es la sociedad, los genes (los efectos de miles de sociedades pasadas) y no sé muy bien qué más lo que convierte a una persona con potencial en un héroe o un villano, un policía o un ladrón, un pintor o un falsificador ... ¿Cuántos falsificadores no habrán sido poseedores de una técnica pictórica aún más depurada que la de aquellos a los que imitaban? ¿Cuántos niños soldado acaban con la inocencia de otros niños solo porque hubo alguien que así lo hizo con la suya?

Y una vez llegado a este punto, sabiendo o al menos pensando que muchas de esas personas no tienen sino la opción de ser lo que la sociedad les marca ¿Quién soy yo para criticarlos?. Critica el pecado, compadécete del pecador, creo que decía el dicho cristiano. Se empieza jugando al billar y se acaba compadeciéndote de un terrorista y apenándote por no hacer nada al respecto. Creo que voy a tener que dejar de jugar al billar con gente habilidosa. Quizás lo mejor sea jugar yo solo, poner un euro cada vez que juego y, al final del mes, llevármelo yo solo.

Un saludo, Domingo.


sábado, 14 de mayo de 2016

Arcoíris doble

Ayer fue día de arcoíris doble y esta vez supe algo má de por qué ocurría. Hará un año leí un libro de un profesor estadounidense famoso tanto por sus conocimientos como por su forma de divulgarlos. Entre otras cosas comentaba cómo buscar arcoíris en cualquier fuente o aspersor que generara una cierta cantidad de agua en suspensión. Si no recuerdo mal, bastaba con que hubiera sol y que estuviera colocado a tus espaldas mientras tú mirabas hacia el conjunto de gotas en suspensión. En esta posición, mirando primero hacia la sombra de tu cabeza y luego levantando la vista unos 20 ó 30 grados, ya podrías ver un bonito arcoíris.

Indicaba también que era relativamente fácil encontrar un doble arcoíris y factible, aunque extremadamente raro, encontrar el triple arcoíris. Ayer, fui no solo testigo de uno doble sino que además el arcoíris primario además de ser extremadamente bello y bien formado, se escondía en la base de las montañas que se sitúan a unos cientos de metros de mi casa. Era como si naciera allí, algo que nunca había visto. Por supuesto, había muchísimas personas fotografiándolo, yo una de ellas.


Cuando fui a compartir la foto con algunos amigos, me encontré con que otros, de otra parte de Málaga, ya lo habían hecho.


sábado, 23 de abril de 2016

Vuelta a la normalidad

Pues sí, y con la sensación de que gran parte de la "culpa" de esa vuelta a la normalidad la tienen las propiedades antiinflamatorias del ibuprofeno que me recetó la doctora. La contractura, poco a poco, parece ir remitiendo y las molestias en los partidos de fútbol son mínimas. Ahora haría falta intentar el enésimo asalto a los 75 kilos. Eso y la obra y la certificación y lo que vaya saliendo, que saldrá.

Un saludo, Domingo.

sábado, 2 de abril de 2016

Estrés

Hoy me decían en el fútbol que las obras provocan estrés, sobre todo si tienes que vivirlas en primerísima persona, en el mismo lugar donde estan se producen. Afortunadamente no es el caso. Pero imagino que tienen razón.

Por otro lado, no solo las obras, también el trabajo en momentos puntuales ... como marzo y abril. Pero bueno, no puedo quejarme. Marzo ya ha pasado y abril no tardará mucho. Cuando a eso se le sume el final de la obra ...

Aunque también es cierto que en mayo o junio probablemente tendré que presentarme a una certificación. Casi veinte años después habrá que estudiar otra vez. Bueno, si es que a esto se le puede llamar estudiar :-). Esto es más bien un ligero paseo por el bosque leyendo un librito de 300 páginas. Varias veces pero en cómodos plazos. A pesar de todo debo reconocer el mérito de mi padre cuando tuvo que presentarse a sus cincuenta y tantos a un examen para no recuerdo qué licencia. Entonces, la materia era muy básica para mí. Sobre todo la relacionada con los cálculos matemáticos. Lo otro era fundamentalmente memorizar y eso sí que me da la sensación que debe ser mucho más complicado para alguien que no está acostumbrado.

Él aprobó y yo estoy convencido de que también lo haré. El problema, más que memorizar, serán las obras ... y el estrés de las mismas, marzo y abril :-).

Un saludo, Domingo.

sábado, 19 de marzo de 2016

Cantándole a la obra desde el sillón

Un corazón de mudanza,
Describía una canción,
Otros coros, mismas danzas,
Ese pobre y oxidado corazón,

Pocas bromas, menos chanzas,
Pintado en la pared a la sazón,
Con tizas aviesas como lanzas
Que guardar luego en el cajón.

¡Bandas sonoras de mi vida!,
¡Mucho esfuerzo, poco relajo!,
¡A otros falta, a mí me sobra!,
Con voz afectada y sentida,
Cantaba el albañil en el tajo:
¡Qué sufridita es la obra!

Ya lo decía mi abuela y tenía razón: "De mayor, búscate un trabajo en una oficina, que vayas bien vestido, limpio" ... y con camisetas de superhéroes podría añadir yo.

No, no puedo quejarme y el soneto de arriba podría parecer hasta provocador. Desde luego no es mi intención. Al contrario, reconocimiento y homenaje. 

Un saludo, Domingo.

sábado, 12 de marzo de 2016

Oniris v0.6 - Capítulo 1

Hoy he decidido cambiar de estrategia y en vez de trabajar en el guión, me he puesto a escribir. Ciertamente no me ha dado tiempo a escribir mucho pero sí que lo justo como para admirar a quienes se dedican plenamente a ello, sobre todo si lo hacen con éxito y me gusta lo que escriben y cómo lo escriben. No puedo sino reiterar en este sentido mi más rendida pleitesía a Julio Verne. Dicen que no viajó pero que se documentó maravillosamente bien ... o incluso mejor.

Solamente en lo que podría ser la primera página a he tenido que acudir a Internet un par de veces para mirar un par de detalles. No sé por qué me da la sensación de que al final (cuando quiera que llegue si es que llega) el libro sería más mérito de Duck Duck Go (el buscador que esto usando ahora y que no guarda tus búsquedas) que mío. Lo veremos.

Un saludo, Domingo.

Un no parar

Quizás es que no me acuerdo de cómo eran las semanas complicadas antes. Quizás es que me acuerdo pero eran simplemente diferentes.
Quizás es que me acuerdo y esta supera a alguna de aquellas.

En principio me decanto por la segunda opción. No hay duda de que he tenido semanas más complicadas que esta. Tampoco hay dudas de que las he tenido menos incluso en aquellas en las que he trabajado más horas que en esta. Me da la sensación de que lo que convierte en especial a esta semana es la concentración de diferentes reuniones extralaborales. Prácticamente no ha habido día sin su compromiso y varios de ellos con dos y hasta tres.

Aunque por otro lado también es cierto que en el plano laboral ha habido que pisar el acelerador y que habrá que mantenerlo pisado durante algunas semanas más. No sería descabellado pensar que la razón por la cual me encontraba tan cansado al llegar la noche de ayer era el cúmulo de circunstancias semanales.

Tocará por tanto descansar este fin de semana y prepararse para el próximo.

Un saludo, Domingo.

sábado, 5 de marzo de 2016

Completamente justificado

Cada vez resulta más justificado ese subtítulo de "un año en construcción" . Aunque hasta ahora he de decir que básicamente es solo destrucción. También construcción pero por ahora solo de muros :-).

Un saludo, Domingo.

sábado, 20 de febrero de 2016

Oniris v0.5

Hoy ha aparecido el primer personaje que no estaba en la historia original; el primer personaje que la propia historia ha creado. Además de eso, también han hecho aparición las matemáticas de una forma un tanto especial. Creo que tiene relación con la teoría de grafos, algo que nunca llegué a estudiar pero que me gusta como ha aparecido y como ha quedado. Eso sí, con estos pasitos de hormiga me surge la duda: Este mapa en concreto ...  ¿verá algún día la luz? :-).

Un saludo, Domingo.

sábado, 13 de febrero de 2016

Oniris v0.4

Tras un par de semanas sin tiempo para escribir, hoy he vuelto a ponerme. Me gusta la historia, lo poco, poquísimo que llevo. Ignoro si hay alguien a quien no le gusta lo primero que se le ocurre. Imagino que debe parecer una buena idea o se descartaría. Otra cosa es luego conforme se le vaya dando forma, modelando. Entonces sí que es posible que se descubra que el camino elegido no es el bueno. Quizás pueda ser el bueno para otra historia y es cuando se guarda por si en la siguiente novela algún personaje necesita de un pasado como parricida, terrorista, político arrepentido porque en la actual comedia romántica nada de eso termina de cuadrar.

De nuevo he vuelto a notar cómo de fácil es acudir a experiencias personales o de conocidos para una primera novela. Debe ser casi delito no hacerlo así o por lo menos debe requerir una gran imaginación a la par que cultura el no hacerlo.

Por último, el ritmo no es (ni yo lo esperaba) muy prolífico. Pero eso no es un problema ahora mismo, la verdad. ¿En un futuro?. Ya veremos.

Un saludo, Domingo.

Ya puede cerrar si quiere

Son muchos años jugando a Hattrick, un juego cuyos días de gloria se encuentran en el pasado. Y son muchos ya también los años que he estado jugando en las divisiones altas, entendiéndose por divisiones altas aquellas en las que juegan los 1000 mejores equipos de los algo más de 20.000 que hay en España (muchos pero nada comparado con los más de 60.000 que llegó a haber).

En 2013 empecé a cambiar la forma de jugar y tuve la sensación de que podría llegar lejos. Podría repetir mi mejor clasificación hasta la época, tercera división, o estar entre los mejores 300 jugadores. El juego no es un juego rápido, es un juego de estrategia y los procesos llevan su tiempo. Cada temporada son 4 meses y un proyecto de 3 ó 4 temporadas de renovación y otras tantas de consolidación tarda un par de años de reloj en suceder ... si es que sucede.

Como decía, yo tenía la sensación de que sucedería y además de que sucedería un pelín antes de lo que al final lo hizo. La razón del retraso fue que coincidieron en mi grupo equipos bastante fuertes, con una fuerza más propia de divisiones superiores ... divisiones a las que fueron, obviamente. Así que con un par de temporadas de retraso subí a tercera división y además lo hice con la sensación de llegar fuerte, aspirando a un mínimo de dos o tres temporadas de nivel competitivo alto, quizás más si conseguía ir renovando jugadores adecuadamente.

Lo siguiente que pasó, reconozco que no lo vi pasar. Había conseguido subir a tercera (III en el mundo deportivo virtual) a trancas y barrancas, con suerte incluida porque tuve que jugar un partido de promoción contra un rival que no se pudo conectar y que facilitó mi ascenso. Esperaba temporadas duras en las que poder eludir el descenso y mantener el equipo en la división que yo consideraba adecuada al potencial del mismo. En vez de eso, esa temporada gané la liga y subí directamente, sin necesitar promoción. Me encontraba entre los 40 equipos mejor clasificados y yo no era uno de los 40 mejores equipos. Era una especie de polizón.

Pero había tenido suerte, había caído en un grupo de segunda división relativamente accesible y tenía incluso opciones, jugando bien mis cartas, de pelear por el título. Y así pasó. A falta de dos jornadas dependía de mí mismo. Si ganaba los dos últimos partidos, ganaba la liga. Subir a primera sería ya otra cosa, otra cosa de la cual, de hecho, no tuve que preocuparme porque a falta de uno, perdí los dos partidos.

Y aquí es donde ocurre la magia. De pasar de ser el grupo que todos querían porque tenía los rivales más accesibles, el grupo se convierte en una temporada en el grupo de la muerte, con varios rivales muy superiores, muy muy superiores. Tan superiores como gafados porque acabaron descendiendo en una sucesión de eventos estocásticos como yo jamás había presenciado en el juego.

Quizás valga la pena reseñar en este punto que el juego se basa en armar un equipo con diferentes cualidades que podríamos definir como boletos de una rifa. Luego tu rival tiene otros tantos boletos, quizás más, quizás menos o quizás los mismos. Pero entonces sale la bolita y el azar emite su resultado. Lo normal es que el mejor equipo, el que tiene más papeletas, se lleve el premio. Lo normal es eso, o lo sería porque no siempre pasa. En particular esta vez no pasó y no pasó en casi ninguna de las ocasiones en las que yo jugaba.

Equipos indudablemente mejores acababan mordiendo el polvo (o el césped virtual) de forma incomprensible. Eso una vez ... y otra ... y otra ... Al final perdí un partido merecidamente, tuve mala suerte en otro par y muchísima suerte en no menos de cuatro o cinco. A falta de tres jornadas dependía de mí mismo y ganar dos partidos me podía bastar. El único problema era que los dos primeros partidos estaban perdidos, de esos partidos perdidos de antemano. Pues bien, el primero lo empaté y el segundo lo gané. Llegué al último partido y el empate me valía ... y me valió.

Había conseguido ganar en segunda división, eso ya nadie podía quitármelo. Quedaba por jugar el partido de promoción, el enésimo partido perdido de antemano de la temporada. Y el enésimo partido en el que lancé la moneda y salió cara. Me la jugué a ir a la prórroga y después a los penaltis y fuimos a la prórroga y gané en los penaltis. Era equipo de primera, estaba entre los ocho equipos mejor clasificados sin ser, ni de lejos, uno de los ocho mejores equipos.

Debo decir que tanta suerte me recuerda a aquel torneo de Casino que gané en la fiesta de la empresa. La única diferencia fue que aquello pasó en un par de horas y esto en cuatro meses pero al final hablamos de lo mismo. Siempre que apostaba al todo o nada o al menos con un riesgo alto, ganaba. Cuando apostaba cantidades menores, perdía. También en aquel torneo tuve una estrategia que iba adaptando según veía el desempeño de mis rivales directos. Intentaba no apostar más a no ser que viera claramente cómo se me acercaban o incluso superaban. En ese caso apostaba una cantidad fuerte al rojo o al negro y que fuera lo que Dios quisiera. Y quiso que fuera rojo o que fuera negro.

Tras acabar el torneo dije, y he repetido frecuentemente después, que jamás pisaría un casino. Todo la suerte que he tenido que tener jugando al casino la gasté allí así que no merece la pena. Y menos si en vez de ser fichas de una fiesta de empresa es dinero propio lo que arriesgas.

Tras ascender a Primera en Hattrick dije y he repetido un par de veces, que ese juego, en apariencia moribundo, ya puede cerrar si quiere. Será un disgusto relativo (no deja de ser un juego) pero dará igual porque yo ya he llegado a Primera. Y sé que no va a suceder pero, si la racha se prolongara y siguiera ganando partidos sin merecerlo ... no, no va a darse. No esta vez :-).

Un saludo, Domingo.

sábado, 30 de enero de 2016

Empieza el jaleo

Esta mañana he ido a donar sangre. Al llegar me he encontrado un panorama que jamás había visto en mis casi 19 años como donante asiduo. Como decía aquella famosa "catch-phrase" del Dúo Sacapuntas, "la plaza estaba abarrotá". En seguida lo vi venir. Pregunté si había algún tipo de promoción a la pareja que estaba delante y el chico contestó que sí, que daban unas entradas para el museo. Mi primera reacción fue irme pues quedaban 45 minutos para el cierre y todo apuntaba a que la espera sería superior a ese tiempo.

El problema estaba en que el próximo día que podía ir me venía bastante peor y ya que estaba allí ... así que hice unas cuentas rápidas: suponiendo que la dotación de enfermeros hubiera tenido en cuenta la promoción y que se pudieran ocupar de las ocho camillas a una media de 15 minutos por donante hacía 8 donantes cada cuarto de hora. En total, en los 45 minutos podrían donar unas 24 personas. Allí no había tantas. Podría haber entre 15 y 20. Lo intentaríamos.

Pues bien, durante la espera voy al servicio y me encuentro con que alguien no había usado la escobilla. Bien, la cosa mejoraba. Cierro la puerta y a continuación un padre con su hijo la abren me ven de espaldas y en vez de volver a cerrar, la dejan abierta. Si recordara alguna expresión española educada para la inglesa no educada WTF, la mencionaría en este momento.

No era tan sorprendente. La gente que acudía a la llamada del ahorro probablemente era del tipo de "Si es gratis dame dos", más bien egoísta, excepto para cuando se trata de compartir con los demás el estado en el que dejan el retrete o que tras las dos puertas cerradas en las que intento entrar, hay alguien.

Pero no, no todo el mundo era así. Por ejemplo, justo detrás de mí había un matrimonio joven con un par de niños. La niña de unos seis años preguntaba el por qué de todo. La madre, con paciencia, le respondía. Una de las cosas que le dijo era que el pinchazo de la aguja era como el de un mosquito y no dolía. La niña insistía en que sí, que tenía que doler mucho. Algo me comentó la madre en ese momento y entonces yo respondí que el dolor debía ser inversamente proporcional al tamaño, queriendo decir que para un niño siempre se magnifica mientras que un adulto sabe manejar mejor esas sensaciones. Por no hablar de que las terminaciones nerviosas son las mismas en un adulto y un niño y, obviamente, en un niño están concentradas.

La madre entonces comentó que se dedicaba a la sanidad (luego charló amigablemente con una de las enfermeras por lo que posiblemente era enfermera también) y que había visto de todo. Personas con fracturas graves en silla de ruedas sin quejarse y personas con rasguños que no paran de hacerlo. Así que todo depende también de la diferente tolerancia al dolor de las personas.

Poco después entré, doné sangre y hasta la próxima vez. Se acabó ese jaleo. El que no se acaba es el que promete durar todavía unos meses o quizás más. Ya veremos.

Un saludo, Domingo.

sábado, 23 de enero de 2016

Oniris 0.3

Estábamos en la organización del guión/novela desde un punto de vista completamente amateur y sin comprobar ningún tipo de documentación escrita al respecto.

Un amigo, amable lector, aspirante a escritor, me aconsejó que lo fuera escribiendo pero no lo publicara por si al final alguien acababa apoderándose del texto. No me considero con el talento suficiente como para que alguien pueda robarme y las probabilidades de que yo pueda ganarme la vida escribiendo libros son de medida cero pero también es cierto que este proceso creativo que quería plasmar en el blog no tiene por qué contenerlo de forma íntegra. También puede ser una especie de resumen y si al final lo que escribo resulta que me gusta ... pues puedo publicarlo. Por otro lado, escribir un libro dedicándole media hora o una hora los sábados ... :-)

Pero sí, voy a cambiar ligeramente el enfoque y solo comentaré en el blog sobre la experiencia creativa. Es algo así como el blog del Guiri y su "Matando a los queridos". 

Así pues, la semana pasada pensé en profundizar en la trama pero he creído mejor centrar el trabajo de hoy en intentar definir el perfil del personaje principal. Cómo es, dónde nació, cómo fue su infancia, su formación, en qué trabajaba, cómo conoció a su mujer ... aunque me doy cuenta de que eso implica también definir el marco temporal donde sucede todo. Había dicho que era un geriátrico pero podría ser en los 80, los 90, en 2020 ...
Al final decidí que fuera de mi edad en la confianza de que me resultará más fácil describirlo. Eso sí, la historia tendrá que suceder en el futuro, obviamente, y tendré que imaginarme los cambios que las personas de mi edad vamos a sentir. Desde el punto de vista de la personalidad es un pequeño collage de personas que conozco, he conocido o he oído hablar de ellas. Entiendo que cada personaje que te inventas es así. En unos casos tirarás de estereotipo y simplemente harás una copia ligeramente adaptada a tus gustos y en otros mezclarás, cual aprendiz de brujo, rasgos y personalidades muy diferentes. La coherencia, tiene pinta de ser un esfuerzo constante a través de todo el proceso.

Un saludo, Domingo.

sábado, 16 de enero de 2016

Oniris 0.2

El pasado domingo fue interesante porque pasé un buen rato pensando sobre el posible guión. Fantaseé con un mundo estilo Harry Potter en el que comunicarse en sueños y levantarse como otra persona fuera algo normal pero me surgían muchas dudas como por ejemplo cómo criar a un hijo en ese ambiente si cada día su padre y su madre eran diferentes, posiblemente sin conocimientos acerca de cómo criar a un hijo (aunque algo aprenderían tras cada "salto") ni, sobre todo, del hijo en sí. Y tampoco era plan de que las pobres criaturitas "saltaran" también.

Al igual que Harry Potter, eso es algo que podría pasar llegada una cierta edad no necesariamente fija. Entiendo que eso es también un recurso ampliamente usado en literatura y/o cine.

Otra opción podía ser que la persona empieza a tener sueños que van siendo cada vez más vívidos hasta que algo se desata y se produce el primer salto. Podría ser un círculo reducido de personas, una red social. Podría haber "invitaciones" que desencadenarían el proceso.

Incluso se me ocurre que el universo paralelo fuera el "after life" y que esa experiencia onírica fueran algunos de los pasos de ciertos tipos de demencia senil o de ciertas enfermedades mentales.

Me gusta la idea. Empecemos
[GUIÓN]

  • Un matrimonio en un geriátrico. Ella con Alzheimer,  tiene un "despertar" y le cuenta al marido todo acerca de Oniris, este mundo de sueños. 
  • Después vuelve a su estado catatónico. 
  • El hombre decide ir a buscarla a Oniris.
  • Tiene acceso a su historial médico y va probando todas las drogas hasta que con una cierta combinación lo consigue
  • Se despierta como otra persona, 50 años más joven con familia, vida ... etc.
  • Lo reconocen porque no está habituado a los saltos.
  • Explica lo que quiere y se lo desaconsejan
  • Vuelve a despertar en el geriátrico y, utilizando una dosis mayor, vuelve
  • Le cuentan algunos trucos para que la adaptación sea más rápida
  • Por la mañana sigue en Oniris pero es otra persona.
  • Va y viene entre psiquiátrico y Oniris hasta que consigue un efecto permanente.
  • ...
  • En plan día de la marmota tiene que conseguir hacer algo para controlar dónde saltar. Puede ser también un estilo "Quantum Leap" donde tiene que conseguir resolver un problema antes de conseguir el siguiente salto.
  • Cada noche sueña con su próxima familia, eso le da pistas, pero no puede cambiar de sueño, algo que desearía para poder acercarse antes a su amada.
  • En un salto se cruza con ella pero no la reconoce
  • Poco a poco se va olvidando de su misión. Si no lo consigue pronto quedará atrapado.
  • Al final lo consigue in extremis. Da con la tecla para evitar que haya más saltos.
  • En el psiquiátrico mueren los dos con una diferencia de pocos días


La verdad es que no tiene nada que ver con las opciones que pensé el otro día pero me parece una historia bonita. Posiblemente también previsible pero ya habrá tiempo de complicarla.

Un saludo, Domingo.

sábado, 9 de enero de 2016

Oniris: La quinta dimensión v0.1

Empecemos por la temática. Alguna vez he comentado que me gustaría escribir algo que versara sobre viajes en el tiempo en los cuales la comunicación entre los personajes tuviera lugar mientras estos duermen. De hecho, cuando salió "Inception" sentí que no habían escrito la historia que me hubiera gustado escribir pero se acercaba bastante.

Por otro lado, los multiversos están ahora en boga y pueden ser apropiados para este fin sin descartar, eso sí, el empleo de un universo normal o simplemente uno literario. El hecho de viajar o al menos de poder comunicarse en sueños podría ser la quinta dimensión a través de la cual todo tuviera sentido. Por eso he decidido llamarlo "Oniris: La quinta dimensión".

Por cierto, vaya por delante que no tengo (ni tengo demasiado interés ahora mismo, la verdad) ningún tipo de formación literaria más allá de las elementales y de la poca o mucha que la lectura haya podido proporcionarme a través de los años. Posiblemente el título es lo último que debería haber elegido pero también posiblemente, cambiará si es que tiene que hacerlo.

Así que tenemos temática y título. Intentaré elegir ambientación y personaje principal rápidamente con el fin de empezar a divagar sobre la trama en una segunda versión. La ambientación podría ser cualquiera pero casi mejor que sea un mundo contemporáneo donde algunas leyes de la física sean ya conocida. A pesar de todo, no habría mucho problema en ambientarlo en la Edad Media o incluso hace unos miles de años. No habría mucho problema excepto mi desconocimiento de las mismas.

Este desconocimiento marcará también al posible protagonista. Será varón y con conocimientos parecidos a los míos; interés por la ciencia, físicas, matemáticas ... etc. Entiendo que esto debería hacer el proceso solo ligeramente más fácil. Quizás no es tan divertido como crear un personaje desde cero pero al menos me sentiré más cómodo. E igualmente, el protagonista cambiará si debe hacerlo en una futura versión.

Y poco más, el próximo día seguiremos.

Un saludo, Domingo.

Un guión

Estas navidades he visto Coherence, una película hecha con un presupuesto mínimo y un guión interesante. Al parecer el director, tras trabajar en algunas grandes producciones, quería cambiar completamente el enfoque y con un bosquejo más que un guión, actores que improvisaban dentro de unas reglas (debido a esa carencia de guión) y una temática simple pero atractiva, lo consiguió.

Esta semana volví a tener un par de esas ideas de las que hablaba en la entrada anterior. Una de ellas ya se me olvidó pero esta todavía la recuerdo. La idea no es más que la de hacer ese guión (y quién sabe si una novela) en el blog. Intentando no plagiar y sin miedo a que me plagien la idea sería ir, cada semana, intentando pulir un poco más ese guión hasta que llegara el momento en el que se pudiera considerar que ya estaba listo.

En cierta forma, este enfoque me recordaba a los blogs colaborativos donde cada autor iba añadiendo algo sobre lo último que hubiera escrito el anterior. Esto sería parecido pero el único autor sería yo. Por otro lado, lo que también me gustaría conseguir es una sensación de evolución, como esas estatuas de Miguel Ángel donde se ve la escultura "salir" de la piedra.

No sé muy bien cómo se podría lograr ese efecto. En programación están los versionadores de código que te muestran las diferencias entre dos versiones dadas. Cuando trabajas en Word, también puedes marcarlas para que la persona a la que le envías el documento, pueda verlas. En un blog esto es más difícil de conseguir. Una opción es la de usar diferentes entradas, copiando el texto inicial, poniéndolo en negro y añadiendo lo nuevo en azul o rojo. Pero claro, si borras o modificas algo es más complejo. Iremos viendo.

En cualquier caso, el guión comienza hoy :-).

Un saludo, Domingo.

sábado, 2 de enero de 2016

Feliz Año lleno de ideas

En las últimas semanas han sido varias las veces en las que me he dicho a mí mismo ... "eso sería una buena idea que se podría comercializar". Algunas de ellas las veía ya materializadas con su icono al estilo Kukuxumuxu. Por ejemplo, un kit para recoger las caquitas de los perros compuesto por palita con mango extensible y recogedor. El nombre en español, "P'alascacas" y el inglés "Pick-a-Poo". Hoy he buscado y, como era de esperar, el nombre (al menos el inglés) es fácilmente utilizable para más cosas. Por ejemplo en esta web lo utilizan para camisetas :-).

Lo malo es que no las apunto y se me olvidan. La prueba está en que solo recuerdo la de las cacas :-). No me importa mucho porque no voy a ponerlas en práctica pero quizás debiera hacerlo. Así, entre otras cosas, podría saber si el año que comienza es un Feliz Año lleno de ideas o si son solo las mismas que llevan un tiempo dando vueltas sin conseguir eclosionar en esta eterna primavera. Este invierno, más eterna que nunca.

Invaden el mundo luminosas ideas,
Gitanas guiris y suecas moras,
Las hay guapas y no las hay feas,
La luz te nutre y todito mejora, 
Así es el sol que Andalucía decora.

Un saludo, Domingo.